
‘Dos menos’ inaugura, los días 6, 7 y 8 de marzo, un mes intenso de teatro y danza de primer nivel en el mejor teatro de Canarias
Marzo es el mes del Teatro y el Cuyás quiere sumarse a la efemérides ofreciendo al público de Gran Canaria alguno de los mejores espectáculos de la temporada escénica de la capital. La consejera de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural del Cabildo de Gran Canaria señaló hoy que “con la presencia de José Sacristán y Héctor Alterio” en la isla “se da paso a un mes de campeonato” sobre las tablas del Cuyás y recordó que la próxima semana será Phippe Decouflé el que traiga a la isla toda la magia de ‘Sombreros’, una de las mejores propuestas de danza contemporánea del mundo. Después tendremos “una sesión de risas con ¿Estás Ahí? Y Paco León”, para terminar “con el fin de fiesta de la celebración de la Gala de los Premios Max el próximo 30 de marzo”.
Pero hoy, señaló Caballero, toca rendirse al genio de “dos monstruos de la escena que nos han hecho el inmenso favor de actuar en el mejor teatro de Canarias”. Dos nombres propios de auténtico lujo de los que Gonzalo Ubani, director artístico de Teatros del Cabildo, señaló que “han encontrado un texto redondo para debutar como pareja teatral. ‘Dos menos’ está escrita para el lucimiento de grandes actores y, en este caso, el resultado es imponente. Es todo un lujo contar con esta pareja de genios en el Cuyás y el público va a responder”, señaló.
Y tanto va a responder que apenas queda un centenar largo de entradas para las tres funciones programadas para el 6, 7 y 8 de marzo. Los que quieran ser testigos de este duelo interpretativo al más alto nivel aún pueden encontrar localidades en las taquillas del Cuyás, en su web (www.teatrocuyas.com) y en el teléfono 902 405 504. Pero quedan muy pocas; el teatro lucirá lleno absoluto en las tres funciones.
Porque el público que participa de ‘Dos menos’, “logra salir con un estado de ánimo tremendamente optimista”, señala Alterio y eso que “el punto de partida de la obra es terrible”. Dos hombres mayores se enteran en un hospital que les quedan pocos días de vida y ahí se inicia “un viaje de dos seres que se internan en el final de sus vidas de manera desenfadada pero enormemente respetuosa con ese final trágico e inexorable. Son capaces de enfrentarse a la vida cuando están a punto de morir y eso se traslada de manera magnífica al público”, asegura el actor argentino.
Una obra que se edifica “sobre un maravilloso montón de escombros”, puntualiza Sacristán, quien alaba el saber hacer del autor del texto (el francés Samuel Benchetrit), un joven que, sin embargo, ha sabido enfrentarse con solvencia a un tema tan escabroso como el fin de la vida. “La obra es un ejercicio brillantísimo por parte del autor, que ha sabido construir un edificio con material de derribo. Ese inicio oscuro que es la proximidad de la muerte se convierte en un repaso vital donde se recuperan pulsiones vitales como el amor, el triunfo o el encuentro con cosas que no se han sabido conservar cuando la vida estaba en su plenitud”, comenta el veterano actor español. Este es el “punto de partida de un itinerario que termina vaya usted a saber”, destaca el intérprete, quien señala que los otros dos actores del reparto (Cecilia Solaguren y Nicolás Vega) completan un viaje “que al final no se sabe siquiera si llegó a existir”.
Este trabajo, que lleva ya en la carretera más de un año, es un auténtico caramelo para dos actores de raza como Héctor Alterio y José Sacristán, que pese a superar los 70 años siguen “disfrutando de este juego que supone hacer creer al público que eres otra persona”, dice el argentino. Sacristán asiente: “es un lujo poder hacer este trabajo. Sigo con las mismas ganas que cuando me ponía las plumas de las gallinas en la cabeza y asustaba a mi abuela diciendo que era un indio sioux”. Complicidad, maestría, saber estar… “Trabajar con alguien como Alterio consigue que cada función sea algo nuevo, único e irrepetible y creo que esa magia que existe entre los dos se traslada al patio de butacas”. Por eso se embarcaron en esta aventura casi sin pensárselo. “Pepe y yo estábamos dando vueltas por el mundo cuando nos ofrecieron hacer este trabajo y dijimos que sí a la primera”, comenta Alterio quien puntualiza que “la obra está dando muy buen resultado y nos dicen que aquí se ocupará el teatro”.
Pues sí. 2.829 afortunados recorrerán los secretos de la vida a través de la muerte de dos personajes irrepetibles. Será uno de los puntos más brillantes de la temporada teatral del Cuyás este año.